Lo que queda de un mal día a veces puede ser un buen recuerdo

13 enero 2005

Para Luis

Se que a lo mejor el titulo de este post puede sonar un poco escueto, pero sinceramente, es así. Este para ti, Luis. Ni para la gente que lea este blog por primera vez, ni para la que ya lo ha visto más veces. Para ti. Y es que, aunque lo lean las demás personas que entren en esta página, sólo tú conoces el significado y el contenido implicito de las palabras que vas a leer.
A lo mejor te parece una tontería, pero eres una de esas personas a las que te hubiera gustado conocer muchos años antes. De esas que te dejan huella para el resto de tu vida. Sociable, cariñoso, simpatico... buena persona en definitiva. Y cuando digo esto no hablo sólo por mi, si no por las tres: tus Ángeles, Los Ángeles de Luis, jajaja. Conocerte ha sido toda una aventura, porque aunque conocer gente nueva siempre lo es, has aportado a nuestras vidas algo más. Ese no sé qué que qué sé yo que no podemos explicar, pero que durante estos meses nos ha hecho felices a quienes te rodeábamos. Tú nos has hecho ver cómo se puede querer a una persona en poco tiempo sólo por como es, por como nos has tratado, por lo que nos has hecho reir y por lo que nos hemos divertido contigo. Y también por las cositas más o menos chungas que hemos compartido, que creo, han contribuido a que los 4 nos sintamos un poco más unidos cada día que hemos pasado, ya fuera juntos o separados, en lo que a fines de seman se refiere...
Cuando recibimos la noticia de que te ibas, fue algo impensable para nosotras. Aún no se habia hecho patente tu ida y ya te estábamos echando de menos, nos resultaba tan raro pensar en ese café del patio/pasillo sin ti... era como una utopía. Por eso no hemos querido creerlo hasta el momento en el que te hemos visto marchar. Y la verdad, aunque tu marcha de ésta tarde haya sido sólo un "hasta la semana que viene", se nos ha partido el alma cuando te hemos visto bajar la escalera, pensando que no ibas al 13, sino a tu casa con tus papis. No queremos reconocerlo en voz alta, pero nos da mucha rabia tener que compartirte a estas alturas, jajajaja.
Parece que esto es una carta de despedida como si no te fuésemos a ver en años, pero es que un solo día sin echar un ratito de charla contigo nos parece una eternidad. Suena a poco si sólo te damos las gracias por estos meses, pero creo que es lo más que se puede hacer con palabras.
Puede además que este post te parezca un poco extenso, pero en realidad es muy poco para todas las cosas que te quisieramos decirte. Pero desgraciadamente las palabras ocupan mucho espacio en un papel, aunque siempre sean pocas para el corazón. Y es precisamente esto último lo que queremos llenar de buenos sentimientos. Llenar tu corazón de lo mismo que has llenado tú los nuestros: buena onda como dice MariVí.
Bueno, despues de todo esto supongo que sobra decir que nos tienes para lo que quieras, desde soplarte la sopa si está muy caliente hasta quitar el monóxido de carbono del aire para que no te haga daño en los pulmones.
Y falta decir que te queremos. Aunque eso ya lo supongas.
Te deseamos lo mejor. Y te vamos a echar tanto de menos... ¡Vuelve pronto!
Fdo.:
Los Ángeles de Luis.